Abandawe es la cueva donde Geillis lleva al joven Ian para ofrecerlo como sacrificio en su ritual para abrir el portal de tiempo.
En la saga...[]
Abandawe es una cueva ancestral que se encuentra en las colinas de la isla de La Española, aproximadamente a dos días de caminata desde la playa. Los indígenas creen que es un lugar mágico. Un arroyo o poza, como una especie de manantial, cruza la cueva.
Durante la estancia de Claire en la Hacienda de la Fuente, el Doctor Stern le cuenta que existen muchos manantiales donde, según las creencias de los nativos, viven espíritus. En la hacienda hay una especie de pesebre de piedra lleno de agua y algas en el que se percibe una corriente proveniente de alguna cueva cercana. El padre Fodgen les cuenta a Stern y a Claire que la primavera anterior encontró un pez blanco y ciego en ese pesebre. Stern recuerda haber visto otro igual en la poza que hay en la cueva de Abandawe. Entonces, Stern explica que Abandawe, llamada así por los cimarrones, se encuentra en un lugar perdido en las colinas y que sólo conocen su existencia los aborígenes del lugar. Los mismos cimarrones consideran Abandawe un lugar siniestro a la vez que sagrado.
Claire no vuelve a oír hablar de Abandawe hasta que, durante la ceremonia vudú en la que Margaret Campbell entra en trance, Ishmael les dice a Jamie y a ella que Geillis se ha llevado al joven Ian a esa cueva. Es entonces cuando la pareja, acompañados del Doctor Stern, conocedor de la ubicación de la cueva, emprenden viaje hasta allí. En el lugar donde está Abandawe hay una ladera empinada y llena de rocas y, en la parte más alta, se elevan grandes piedras formando un círculo. Cerca de este círculo se encuentra la entrada a la cueva.
Claire parece percibir un leve zumbido que se convierte en un ruido más grave y palpitante cuando toca las piedras y cae desplomada en una especie de trance. En ese estado percibe a Geillis y sus grandes ojos verdes lo que hace que Claire sepa que la bruja se encuentra en la cueva.
Dentro de la cueva la oscuridad es total. Hay un pasadizo desigual con pasadizos laterales. En algunas partes los muros se estrechan hasta casi no permitir el paso y en otras, las paredes están tan separadas que no se podían tocar aún con las manos extendidas. La sensación de percepción de las paredes aunque no estuviesen a la vista perturbaba a Claire, una sensación de una oscuridad que no estaba vacía.
Claire le dice a Jamie que escucha algo similar a un rumor, pero no como el zumbido que oía en Craigh na Dun, pero él no oye nada. El sonido la lleva por un túnel que hay a la izquierda al final del cual ven algo de luz. El túnel termina en una gran cámara donde ven a Geillis dibujando un pentágono en el suelo y al joven Ian maniatado y amordazado en el centro del mismo.
En ese lugar el zumbido es más potente para Claire, que localiza el origen en una gran grieta abierta en la roca. Por la grieta también resonaba el viento, al que Jamie quita importancia diciendo que sólo es la respiración de la cueva. Esto inquieta aún más a Claire, al contemplar la cueva como algo vivo.
En la realidad...[]
Abandawe no es un lugar real aunque en La Española sí existían muchas cuevas consideradas lugares sagrados por los aborígenes, en las que realizaban rituales para contactar con sus dioses y eran lugares de magia y peregrinación. Existe una cueva, llamada La Mancha, en la que aún hoy se celebran ritos sobre petroglifos y sigue siendo lugar de culto y adoración. Esta caverna también es conocida como Cueva de Mana, tiene tres entradas conectadas por una gran red de corredores. En la sala principal es donde tienen lugar los cultos. Esta cueva fue utilizada para realizar ritos y sanaciones por parte de Viviana de la Rosa, una “curandera y vidente” de principios de 1900.[1]
En la serie de TV Outlander...[]
Para grabar las escenas de Abandawe se utilizó un set de filmación creado en Sudáfrica. La entrada de la cueva de Abandawe fue construida cerca de la vegetación de la isla en la que Claire se filmó el episodio 11 de la tercera temporada. El interior está en un estudio de sonido en Ciudad del Cabo, Sudáfrica.
Tanto el diseñador de producción Jon Gary Steele como Matt Roberts buscaron una cueva real en Escocia donde pudieran filmar las escenas de Abandawe, pero ninguna de las ubicaciones que visitaron les convencieron. Visitaron numerosas cuevas escocesas pero unas eran simples agujeros en el suelo, otras más bien parecían canteras... la sensación que les daba era que parecían unas cuevas falsas. Así que decidieron que lo mejor sería hacer una cueva falsa que pareciera real.
Gary Steel se encargó de ello con la premisa de crear una cueva bastante grande, pues tendría que albergar al elenco de actores y al equipo de rodaje. Matt Roberts decide colocar antorchas en las grietas para conseguir iluminar con rayos de luz y coloca un estanque de agua en medio. También se le ocurre hacer un agujero en la parte superior para que el agua del estanque quede iluminada y se perciba mejor la niebla y la humedad del ambiente.[2]
Roberts recuerda que la grabación en la cueva fue un poco claustrofóbica pues sólo había dos lugares, separados por un gran charco de agua, desde donde se podía filmar. Él se encargó de filmar la parte de la lucha de Jamie y Hércules mientras al otro lado rodaban el enfrentamiento entre Claire y Geillis de tal manera que luego, en post producción se podía pasar de una escena a otra fácilmente.[3]
Galería de imágenes de la serie[]
