Forastera/Outlander Wiki
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La Adoración Perpetua del Santo Sacramento es una práctica religiosa consistente en adorar, contemplar y/o acompañar al Santísimo Sacramento.

En la saga...[]

En Forastera tenemos conocimiento de esta práctica cuando,escapando de las penurias que vivieron en Escocia, Jamie y Claire huyen a Francia. A su llegada son acogidos por el tío de él quien está a cargo de la Abadía Sainte Anne de Beaupré.

Mientras Jamie lucha por recuperarse tanto física como espiritualmente, Claire entabla amistad con un monje franciscano.

El padre Anselm participa regularmente de la práctica de la adoración perpetua del Santo Sacramento. Le cuenta a Claire en qué consiste y la insta a que lo acompañe.

Ella acepta y concurre con el monje a la capilla. Se sienta y comienza a escuchar los pequeños sonidos del silencio y así pasa el tiempo hasta que el padre Anselm se para delante de ella y le hace señas para irse.

Sorprendida le pregunta cómo es que él no estaba, si se suponía que no se debía dejar solo al Sacramento. Anselm la mira y le dice: no lo deje solo, usted estaba allí. ¿Y usted estuvo sola? A lo que Claire responde: No. No estuve sola.

Otra noche decide volver a la capilla. En el silencio y en la oración encuentra una respuesta. Salió sintiendo que le habían entregado algo valioso y frágil. Que aquello dado era un alma.

Claire sabe que, llegado el momento, algo tendrá que hacer para liberar el espíritu de Jamie de los demonios de Jack Randall.

En Viajera nuevamente se menciona cuando, un día de invierno de 1948 en Boston, después de una larga jornada de contratiempos, Claire apenas estaba lista para recibir a los invitados cuando llega Frank y le reclama por su apariencia. Entonces ella, que ya no puede más con las exigencias del día, le entrega a Brianna , arroja la botella de vino contra el marco de la puerta y sale corriendo.

Una vez en el auto decide ir a la iglesia de San Finbar[1][2];si bien Claire no había sido muy devota, el acto de contemplar el Santo Sacramento y rezar le seguía proporcionando paz y tranquilidad.

Al llegar firma el libro de visitas y se arrodilla detrás del adorador de las once. Cerró los ojos escuchando el silencio, recordando todo el torbellino de emociones que vivió durante el día, luego se relajó y dejó de pensar como siempre le sucedía. Entonces, una vez más, todos sus pesares se aliviaron. Rezó por Jamie y rezó por ella.

Varios minutos después, cuando el siguiente adorador del Santo Sacramento llegó, se levantó y se fue.

Claire en la capilla

Historia y actualidad...[]

Cuando Jesús llegó con sus discípulos a Getsemaní en vísperas de su crucifixión. Les dijo: quedaos aquí, y velad conmigo. Mi alma está muy triste, hasta la muerte; Luego se retiró y siguió orando.

A su regreso encontró que varios de sus discípulos dormían. Entonces le dijo a Pedro: Simón ¿Duerme? ¿Así que no habéis podido velar conmigo una hora?

Y nuevamente se fue. Oró por tercera vez. Al volver los halló otra vez durmiendo.

Jesús entonces les dijo: Dormid ya, y descansad. Basta, la hora ha venido; he aquí, el Hijo del Hombre es entregado en manos de los pecadores. Levantaos, vamos; he aquí, se acerca el que me entrega.[3]

La adoración perpetua del Santo Sacramento se basa en este pedido que realiza Jesús a sus discípulos. Consiste en que lo acompañen y permanezcan despiertos mientras él está orando porque sabe que ha llegado su hora.

Esta práctica comienza en los monasterios y conventos donde los religiosos se turnan para que siempre haya alguien acompañando al Santísimo Sacramento, representando así aquella solicitud de Jesucristo.[4]

La primera adoración perpetua de la que hay constancia comenzó en Aviñón (Francia) con motivo de la celebración y agradecimiento por la victoria obtenida sobre los cátaros en las últimas batallas en la Cruzada albigense.[5]

El 11 de septiembre de 1226, en Acción de Gracias, cumpliendo con el pedido del rey Luis VII, se expuso el Santísimo Sacramento cubierto con un velo, en la Capilla de la Santa Cruz.

Esta exposición convocó a tal multitud que el obispo Pierre de Corbie considero adecuado continuar con la adoración por la noche y el día. La propuesta del obispo fue ratificada por la posterior aprobación proveniente de la Santa Sede.

Continuó la adoración hasta 1792 cuando fue suspendida por la Revolución y en 1829 se reanudó gracias a los esfuerzos de la “Confraternidad de los Penitentes Gris”.[6]

Se dice que en la Catedral de Lugo, España, hubo adoración perpetua por más de mil años en expiación de la herejía Prisciliana.

La adoración perpetua del Santo Sacramento se continúa practicando hasta la actualidad por diferentes órdenes religiosas en todo el mundo.[7]

Adoracion perpetua del Santisimo Sacramento

Referencias[]

  1. https://es.wikipedia.org/wiki/Finbar San Finbar
  2. https://es.wikipedia.org/wiki/Catedral_de_San_Finbar Catedral de San Finbar
  3. Evangelios: Mateo 26:36-46, Marcos 14:34-42, Lucas 22:39-46
  4. McMahon, Joseph. "Perpetual Adoration." The Catholic Encyclopedia. Vol.1. New York: Robert Appleton Company, 1907.http://www.newadvent.org/cathen/01152a.htm.
  5. Enciclopedia Catolica Online - Albigenses
  6. Enciclopedia Catolica Online - Confraternidades de Penitentes
  7. Adoración Perpetua
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