Diana Gabaldon ha dicho que el personaje de Claire surgió como un hongo, un personaje que surge de repente y en cualquier lugar y luego van dándose a conocer. Gabaldon sabía que sería una mujer inglesa pero los restantes detalles de su persona y circunstancias se fueron revelando por sí solos.[1]
El origen de su nombre[1][]
El nombre de Claire fue el resultado de haber leído recientemente La casa de los espíritus de Isabel Allende con su personaje tan significativo llamado Clara. Allende en ese libro usa de manera recurrente las palabras Clara y clarividente a través de la historia pues este personaje tenía un cierto nivel de talento sobrenatural. Esto creó un ritmo que le gustó a Diana Gabaldon y que, según ella, probablemente todavía daba vueltas en su mente cuando Claire tuvo que identificarse y el nombre estaba allí revoloteando en su mente.
El origen de su apellido[1][]
“Beauchamp” viene como resultado de la investigación que había hecho Diana hasta aquel momento y que apuntaba a la relación de Francia con Escocia y su importancia en el Alzamiento jacobita. Por esto, le pareció deseable que Claire tuviera un apellido francés por si luego era útil invocar su conexión francesa en algún punto de la historia.
En la escuela superior Gabaldon había tenido una profesora de apellido Beauchamp y le había llamado la atención que usaba la pronunciación “Beechum” en vez de la original francesa. Y este apellido y su dual pronunciación le pareció conveniente para una mujer inglesa de apellido francés.
Su segundo nombre[]
De donde viene “Elizabeth”? Gabaldon confiesa que este nombre simplemente encajo bien. Al nombrarla, Claire Elizabeth Beauchamp, tomó rápidamente control de su historia y comenzó a contarla ella misma por lo que Gabaldon cuenta que decidió no oponerse y la siguió escuchando a ver qué pasaba.